Juegos para desarrollar la expresión corporal en los niños
Para que facilites el desarrollo de la expresión corporal en tu hijo te reservamos divertidos y efectivos juegos que, juntos, pueden hacer en casa.
Con el objetivo de darle al niño libertad de movimientos, a la hora de hacer estos juegos, debes propiciarle un espacio amplio en donde no corra peligro.
Juegos simbólicos para niños de 2 años
Los juegos de imitación, o juegos simbólicos, consisten en representar animales, cosas, personas y personajes.
Digamos, por ejemplo, dibujos animados que le gusten mucho a tu hijo, o el comportamiento usual de otro miembro de la familia.
Si se trata de imitar a una rana deben saltar y simular su croar.
Si es un caballo, trotarán a la vez que dicen: ¡Hi…jijijiji!
O igual pueden aparentar que son motores. Para esto moverán las manos como si las tuvieran puestas en el acelerador, mientras corren por todo el lugar.
Juego de roles para niños mayores de 5 años
El juego de roles se pone en práctica a través de la asimilación y la imitación de un rol determinado.
En este ejercicio tu hijo va a adoptar el rol del enfermero y tú el del paciente.
Por eso deberás acostarte sobre la alfombra para que él te inyecte, te tome la presión, te cure las heridas, te dé medicamentos, te mida la fiebre…
Igual, tu niña puede ser tu mamá y entonces deberá darte el biberón, alimentarte con papilla, peinarte, vestirte, dormirte, cantarte…
Juego para la expresión facial
Para ayudarle a tu hijo a desarrollar la expresión facial a la vez que ponen en práctica la imitación y el juego de roles les recomendamos pararse delante de un espejo.
Su papel será el de imitar todas las expresiones faciales que tú hagas.
Se pondrán tristes, alegres, se asombrarán, sacarán la lengua, harán una mueca…
Un juego efectivo para la expresión corporal
Para finalizar, tenemos otro juego muy efectivo que lo mismo sirve para llevarlo a cabo con niños mayores que pequeñines de 2 años.
Claro está, según la edad de tu hijo será el nivel de dificultad que le pongas.
Este juego consiste en recorrer en círculo toda la habitación: caminando o corriendo, según la edad que tenga el niño.
A medida que ambos avances, uno a cierta distancia del otro, irán imitando cosas, animales o posturas.
Las órdenes las darán uno y otro indistintamente, recalcamos, si tu hijo tiene edad para eso.
Supongamos, van caminando y de pronto dices ¡en cuclillas! y se agacharán mientras continúan avanzando en cuclillas.
Luego dices ¡en cuatro patas como un gato!, y adoptarán esta postura sin dejar de moverse.
¡Saltando!
¡Caminando de espaldas!
¡Nadando como perritos!
¡Caminando como cangrejos!
Y así sucesivamente.
Mamá, debes saber que los juegos de expresión corporal estimulan la imaginación y la espontaneidad de los menores. Hacen que pierdan la timidez y sean más desinhibidos.
No olvides hacerlos en casa.